26.6.08

Cae la primera vértebra cervical


(Des) Vertebrando miedos

Vértebras cervicales


C-1

mi vértigo aleja tu caricia.
a veces también ocurre lo contrario;
el contacto con el borde de tu sueño diluye mis abismos

(Imagen: Wikipedia)

24.6.08

la noche en que me enamoré de Louise Bourgeois




Louise Bourgeois (París, Francia, 1911)
Mamá
(Maman)

1999
Guggenheim Bilbao Museoa
Características:
Bronce, acero inoxidable y mármol
895 x 980 x 1160 cm



El elegante bronce titulado Mamá, que forma parte de su reciente serie titulada Araña (Spider), es un paso más en el proyecto psicológico de Bourgeois. De acuerdo a la opinión de la artista, su elección de un insecto pone de manifiesto la duplicidad de la naturaleza de la maternidad: la araña utiliza la seda tanto para fabricar el capullo como para cazar a su presa. Esta Mamá gigantesca se sostiene ominosamente sobre unas patas que semejan arcos góticos y que funcionan al mismo tiempo como jaula y como guarida protectora de una bolsa llena de huevos que se encuentran peligrosamente adheridos a su abdomen. A través de esta exageración, Bourgeois pone de manifiesto el enorme poder, no de la araña en sí, sino de la respuesta emocional que suscita. A lo largo de la serie, que presenta como un homenaje a su madre, la artista evoca impulsos contradictorios.

Deseando amar

22.6.08

Flor de algodón convertida en cobre por efecto del agua



SI consigo llenarme las maletas de vocales,
de utópicos bivalvos,
de levaduras suaves,
de manos-labio.

Si concedo subir las escaleras,
bajar los toboganes ciclotímicos,
y yacer en paralelo al cielo
a contar los cúmulos alados.

Si convierto la patina del miedo
en capa de öxido,
y suavizo con lija de palabras
mi garganta dolida de amazona.

Si confieso.
Abandonaré la península de hielo,
y llegará el deshielo y el desmiedo

Öxido debería llevar diéresis


En presencia de una patina de miedo, la excesiva exposición al viento del Cantábrico genera una capa de óxido en el interior del aparato fonador. 

21.6.08

Diluvio


Diluvio: Primera persona del singular del presente de indicativo del verbo diluviar.

El cielo lechoso se contrae. Calla.
Sístole,
diástole.

Aleteo lumínico;
estrépito.
Agua

Mi siesta tiembla en lluvia.
Sueño alfileres en los cristales,
y al despertar encuentro sólo gotas cansadas de bochorno.
Puños líquidos.

Sístole,
diástole.
Aleteo lumínico;
estrépito.
Agua

18.6.08

hUida


Transformo este no lugar
masticando versos de - spacio

15.6.08

ambigüedad y duda



Ambigüedad de la catástrofe

Lo había perdido todo:
amor, familia, bienes, esperanza.
Y se decía casi sin tristeza:
¿no es hermoso, por fin, vivir sin miedo?



Nada grave. Ángel González

11.6.08

Algo comienza: negritas a posteriori


Tengo de nuevo algo atravesado en la garganta. Escupirlo es difícil. Difícil (¿por qué esta palabra está tan poblada de I s?) porque no sé por dónde empezar a desenredar esta maraña que va formando el día, y más aún cuando éste se diluye en unas vacaciones en una ciudad que era tu ciudad pero que vive ahora ausente de ti. Extranjera en tu propio país, dirían.

El caso es que me habitan demonios varios y que voy aprendiendo a no ocultar este deshielo que lo va anegando todo poco a poco. Aprender a no taparme la boca con las manos cuando se me escapan palabras, a mostrar mi cuchara y descubrir por ello que cuchara en olof, un dialecto de Senegal, se dice cUdU, así con dos U s. (Empiezo a creer que las vocales no admiten plural)

Hoy Paula me ha dicho que la cuchara es el cubierto amable. Amable ha dicho. Es impensable llevar un cuchillo colgado del cuello o un tenedor. Pero una cuchara sí, claro. Cuando tomé la decisión ciega de irme a Michigan, repetía una y otra vez que me sentía atraída por un imán. Recuerdo que Pablo preguntó si uno religioso o de metal. Empiezo a pensar que, pese a que la cuchara tardo en llegar, llegó justo en el momento preciso en que estaba dispuesta a atraerlo todo.

Pero esta cuchara que, por consejo de Rebe, no me quito atrae cosas. Atrajo a Javier un chico que se montó en el metro y, que al verla colgada de mi cuello , me preguntó qué era para mí aquella cuchara. Debió considerar que encerraba toda mi identidad, porque acto seguido se sacó dos chapas grabadas y colgadas de una larga cadena de plata, en las que se leía su nombre, su dni y su teléfono. Javier epiléptico. A mí aquel instante me emocionó muchísimo y quizá allí terminé de entender que la cuchara era un imán puente, o un puente imantado.

Rebeca dice que todos los días lleva la cuchara colgada del cuello. Yo de momento empiezo a entender que los días se dividen en dos grupos: días con cuchara y días sin ella. Yo decido ponérmela o no, pero me huele que mejor haría colgándome la cuchara del cuello cada día. Al menos, como dice Paula Uriona, la cuchara es un cubierto amable.

9.6.08

A Paula que esta tarde desató todo mi amor,



Hay siempre una historia por escuchar. Si abres las orejas.
Ella quería irse a la verbena, me dice. En casa repetían que de los novios de la guerra no había que fiarse. Pero quería bailar el tamboril. Dice que no podía, que debía estar en casa antes de que cayese el sol. Yo llegaba a casa entredosluces, noche y día, sol y luna, me cuenta. Dice que trabajaba toda la semana, y mucho, refugiada en un delantal de peto, vendiendo fruta. Los domingos me dejaban salir, en ese dintel silente de la semana, dice. Y después nada, esperando al domingo siguiente; así pasó la juventud de Paula Uriondo.

Certezas


Foto: Gracias Anna

Hay que ser muy valiente

Hay que ser muy valiente para vivir con miedo.
Contra lo que se cree comúnmente,
no es siempre el miedo asunto de cobardes.
Para vivir muerto de miedo,
hace falta, en efecto, muchísimo valor

Nada grave
Ángel González

8.6.08

Sofá horizontal y luz acuática





Intentaré saciar mis sed con algunos ojales y un salpicón de nata líquida.
Soy testaruda. Tengo una vocal atravesada en la garganta como un beso. Abrazo por detrás y me fío más de los ojos oscuros y de las sonrisas verticales que bailan en el metro. Aspiro a ser costurera e hilvanar.
Recojo fotografías de desconocidos del suelo. Alimento el olvido. Me encanta ser glaneuse de estrellas rojas abandonadas en un desfile. Camino mirando al cielo por la calle. Me interesan las hojas de los árboles y alguien me contagio el gusto por los cúmulos. Tengo algo en la garganta. ¿Está inflamada?

3.6.08

Sospecho


sospecho una sombra de padre

Sigo bebiendo


estos versos

ESTOS VERSOS APENAS
TRAZO FLUVIAL, MANSO DESPLIEGUE,
MANANTIAL DE INTUICIONES Y MEMORIA,
PRIVADA EXPERIENCIA,
VIVIDA REALIDAD DESHECHA EN
EQUIVALENCIAS LITERARIAS.

RAÍZ VISIBLE
DE UN MALTRECHO TESTIGO
QUE, PARA SU REPOSO,
AHONDA EN EL GRITO RITUAL MEDIANTE PROPIAS
CLAVES DE INFORTUNIO COLECTIVO.
ARDUA IDENTIFICACIÓN, VÉRTIGO HUMANO...


Alberto Vega. Plenilunio

1.6.08

vértebra U vértebra


Imagen:Wikipedia

Sigo tratando de entender si he de vertebrar o desvertebrar el miedo. Chi sa? Construyo la columna. (Dicen que es de hielo). Decidiré después si he de destruir las vértebras o hacer de ellas firme calavera, esqueleto seco, amuleto. De momento sigo conjurando la negatividad y repitiendo frases que ya otros dijeron.